Actualmente el término y concepto de
emprendimiento se ha vuelto algo muy importante.
Sin duda, la relevancia que este tiene
hoy en día se debe mucho a los desafíos que el contexto económico impone a la
sociedad.
Es que de eso se trata emprender, de
asumir, enfrentar y superar con actitud cada uno de los retos de la vida, con
la finalidad de llegar más allá de los límites laborales y financieros
establecidos tradicionalmente.
Es importante destacar que el
emprendimiento se ha vuelto popular más que todo en la población joven y de
mediana edad, siendo los así llamados millennials (jóvenes entre 20 y 35 años
de edad) el sector de la población que más está llenando espacios como
emprendedores.
Esto se debe a que se caracterizan por rechazar trabajos con horarios rígidos y anhelan tener independencia financiera.
Este aspecto anteriormente mencionado
pudiera ser una de las razones por la cual, la idea de emprendimiento, hoy en
día es asociada erróneamente a jóvenes con deseos de comerse al mundo.
Pero la realidad, es que el mundo ha
cambiado tanto, que ya eso no tiene porque ser así.
El emprendimiento también es una opción
perfectamente viable y válida para personas mayores de edad.
Entre los avances de la sociedad en el presente siglo está el incremento de la esperanza de vida.
No solo hay un incremento en la
población de adultos mayores en varios países, sino que también hay mejoras en
las condiciones de salud y vitalidad con la que muchas personas llegan a la
tercera edad.
Esto ha ido borrando la idea de que con
la jubilación todo ha terminado. Por el contrario, tal vez es la hora de
aprovechar esa salud y esas energías para emprender.
Las personas mayores por lo
general cuentan con muchos conocimientos y habilidades que han aprendido,
desarrollado y perfeccionado a lo largo de su vida.
A esto se le suma la vasta experiencia
acumulada en el trabajo. Todo esto representa una serie de factores que hacen
que el emprendimiento en la tercera de edad se convierta en una muy buena idea.
Un porcentaje considerable de personas mayores pasaron gran parte de su vida dedicándose a tortuosas horas de trabajo
en un área que no era de su completo agrado.
Muchos nunca pudieron dedicarse a su verdadera pasión, a dejarse llevar por el latir de la vocación con la que nacieron.
Por esta razón, que una persona mayor
comience un emprendimiento siguiendo la misma actividad a la cual se dedicó
toda una vida, parece no ser muy recomendable, a menos que haya sido esa, su
actividad predilecta.
Una tercera edad con energías y ganas de vivir, es el momento perfecto para preguntarse cosas como ¿En qué tengo talento? ¿Para qué soy bueno? ¿Qué es lo que más disfruto haciendo?
Una tercera edad con energías y ganas de vivir, es el momento perfecto para preguntarse cosas como ¿En qué tengo talento? ¿Para qué soy bueno? ¿Qué es lo que más disfruto haciendo?
¿Tengo la solución para algún problema
en mi comunidad? ¿Me gusta una idea con la cual puedo ganar dinero? ¿Tengo las
habilidades necesarias para crear un producto perfectamente comercial?
Emprendimiento ¿Una opción para la tercera edad? son preguntas que le ayudarán a la persona mayor, definir un emprendimiento para sacarle provecho a esas energías que aun
tiene.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Amigos y suscriptores, muchas gracias por compartir sus preocupaciones y aportes para envejecer mejor.